Arrogantes

Eran unos arrogantes: se habían desnudado sin ningún tipo de pudor en plena avenida 18 de Julio para exhibir jactanciosamente sus bien marcados músculos y la blancura de su piel. Allí estaban, pavoneándose en la vidriera como si tal cosa, esforzándose en avergonzar a los transeúntes que pasaban y que eran, hay que reconocerlo, mayoritariamente poseedores de unos músculos bastante más fláccidos o decididamente más viejos. Pero no me impresionan mucho, de todos modos, estoy convencido de que eran pura pose.

Comentarios

Entradas populares de este blog

La nao

En capas

Café en Broadway