La presa



El hombre se alejaba rápidamente por la rambla como si lo corriesen. No llevaba caña, por lo que presumo que no era un pescador y había capturado su presa con las manos, como un auténtico depredador, de esos que aparecen de tanto en tanto en los documentales de animales salvajes que pasan por la tele como relleno.

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