En todo su derecho


Pasé por el nuevo local de mi amigo Enrique, el que vende "cosas viejas", como le gusta a él llamarlas, en la calle Tristán Narvaja y en la vereda estaba su perro, muy entretenido jugando con un amiguito menor que él. Es un animal joven y se sobreentiende que aún está en la edad de parrandear, ya lo van a alcanzar las responsabilidades a él también.

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