Libro
Aunque rodeado de computadoras, lectores electrónicos, teléfonos "ïnteligentes" y demás, el viejo libro, con sus páginas blancas y acariciables aún conserva un lugar, no solamente en nuestros nostálgicos corazones, sino en nuestras bibliotecas, en la mesita de luz y hasta en medio de las arrogantes y despechadas pantallas.
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